La guerra, horror!

Escribo sobre Ignacio Chávez, figura cumbre del siglo XX mexicano, y recuerdo la inauguración del Insituto de Cardiología y la fundación de la Sociedad Interamericana de Cardiología. Al evento acudieron cardiólogos de toda América, pero faltaron los representantes europeos. La guerra impedió que cruzaran el océano a intercambiar y compartir sus conocimientos con sus colegas del nuevo mundo. Hoy vivimos tiempos turbulentos, de crispación y polarización, fronteras cerradas, racismo y xenofobia, conflictos armados y amenazas. No puedo imaginar, bajo este ambiente, lo que se vivió en aquella primavera de 1944. Ojalá nunca vivamos algo así de nuevo.